Fuimos un grupo de amigos y nos lo pasamos genial. Hicimos todo tipo de actividades, como ciclismo y pesca, ¡fue súper divertido! Además, la casa era preciosa y las habitaciones eran amplias y cómodas, perfectas para nosotros. El desayuno también era delicioso y había un montón de opciones para elegir. Definitivamente volveremos.

Lo único que nos faltó fue un poco más de vida nocturna cerca del hotel. Nos encanta salir de fiesta y hacer nuevos amigos, pero no había muchos lugares cercanos para hacerlo.

¡Mi estancia en Casa de Ladreda fue maravillosa! El ambiente encantador del pintoresco pueblo y la atención del personal, especialmente de Jesica, fueron excelentes. La habitación era amplia y cómoda, y teníamos una hermosa vista desde nuestra habitación. Además, simplemente amé la atención al detalle, como la botella de agua en la habitación y el café e infusiones disponibles en las zonas comunes durante toda nuestra estancia. Definitivamente repetiría esta experiencia.

La comida matutina en general era deliciosa y estaba muy bien presentada. Sin embargo, creo que se podría mejorar ofreciendo opciones más variadas para el desayuno.

Mis mejores aspectos de este lugar incluyen la amabilidad y atención del personal, desde el momento en que llegué hasta el final de mi estancia. Además, me encantó la limpieza del hotel y la presentación cuidada del desayuno, con opciones caseras y una variedad de bebidas. La ubicación también es conveniente, con fácil acceso a lugares de interés y transporte cercano.

Increíble decoración y atención al detalle! Personal amable y entusiasta. Ambiente tranquilo y relajante. ¡Repetiremos sin duda! 😊 #positivo

Lo mejor fue el entorno natural y tranquilo en el que se encuentra el hotel. Nos permitió descansar y relajarnos durante el fin de semana. Además, la decoración del edificio era hermosa y el mobiliario antiguo le daba un toque especial. También nos gustó que teníamos acceso a una cafetera y a pastelitos para servirnos sin costo adicional.

Lo peor fue la ubicación del hotel, ya que la carretera para llegar era muy estrecha y estaba en malas condiciones. Además, durante la noche resultaba peligroso conducir por esa zona.

Siempre vuelvo a este hotel porque me siento como en casa. La primera vez que estuve aquí, me dieron una botella de agua por la noche. Tiene todo lo que necesito: Wi-Fi gratis en las habitaciones, estacionamiento gratuito, aire acondicionado, TV de pantalla plana. También hay actividades como senderismo, ciclismo, canotaje y pesca. El bar y la sala de juegos son geniales. No se permiten mascotas ni fumar en el lugar. Volveré para Pascua.

La casa espectacular, tranquila y con buenas vistas. Habitación espaciosa, cómoda y bien cuidada. Anfitriona genial, amable y atenta. Desayuno bueno y personal muy amable y servicial.

Casi perfecto.

Mis amigos y yo nos divertimos muchísimo aprovechando las actividades que ofrecen. Pudimos salir a hacer ciclismo y también disfrutamos de la pesca y el piragüismo. ¡Fue una aventura genial! Además, el ambiente del lugar era increíblemente relajado, perfecto para desconectar y disfrutar del tiempo juntos.

Me hubiera encantado que hubiera un poco más de vida nocturna cerca. Como adolescentes que somos, nos gusta salir de fiesta y hubiera sido genial tener un lugar cercano donde poder disfrutar de eso.

La instalación es bonita y bien conservada, las jóvenes que atienden son agradables. El sitio es ideal para relajarse.

La ubicación no es cómoda para visitar los alrededores, la carretera es estrecha y peligrosa de noche. No hay lugares cercanos para cenar.

Las habitaciones supercómodas y con hermosas vistas. Jennifer, la anfitriona, fue increíblemente amable y nos dio buenos consejos sobre qué visitar y dónde comer. Además, había café, té y bollitos siempre disponibles. Hicimos un montón de actividades emocionantes como ciclismo y pesca. ¡Fue una experiencia divertidísima con mis amigos!

Lo único que nos hubiera gustado es que hubiera más opciones de entretenimiento nocturno para jóvenes, como fiestas o bares cercanos. De resto, todo estuvo perfecto.

me encantó mi estancia en Tangil y en particular en Casa de Ladreda. La casa es preciosa y la decoración elegante, con una entrada espectacular entre viñedos y un entorno pintoresco. Destaco la limpieza y el trato exquisito de Jessica, quien estuvo atenta a todos los detalles y nos brindó información y recomendaciones. El desayuno fue delicioso y cuidadosamente presentado. Sin duda, repetiré la experiencia.

La cama era un poco pequeña y se movía mucho al ser de madera.

El edificio está rodeado de hermosos viñedos y ofrece un ambiente tranquilo y pintoresco. Las habitaciones son espaciosas y cómodas, algunas incluso tienen vistas espectaculares. Además, el servicio es excelente con personal amable y atento. El desayuno es delicioso y se presenta de forma muy cuidada.

La ubicación puede ser un inconveniente para aquellos que deseen explorar los alrededores de Portugal y España, ya que la carretera de acceso es estrecha y puede ser peligrosa de noche.

La atención de Jéssica fue espectacular, nos hizo sentir como en familia. Las instalaciones son impresionantes, con habitaciones grandes y comodidad absoluta. Además, el entorno es pintoresco y tranquilo. El desayuno es delicioso y el trato del personal es inmejorable. ¡Volveremos seguro!

El edificio y su entorno son espectaculares. La relación calidad precio es inmejorable. La habitación es muy cómoda, con un mobiliario antiguo muy difícil de encontrar. La atención, amabilidad y simpatía de Jessica hacen la estancia insuperable. La casa es preciosa y está decorada con muy buen gusto. El salón es muy cómodo y dispone de cafetera y calentador de agua para hacer té con disponibilidad total a cualquier hora. El WiFi tiene una excelente calidad.

Me sentí seguro, no tengo ninguna queja en absoluto.

Los puntos positivos

Un detalle que me encantó durante mi estancia fue la amplia selección de actividades ofrecidas por el hotel. Tuve la oportunidad de disfrutar de un relajante paseo en bicicleta por los pintorescos alrededores, lo cual fue una experiencia única. La sensación de libertad al pedalear a través del paisaje fue como si estuviera disfrutando de un paseo en una maravillosa pintura al aire libre.

La cama para dos personas era estrecha y un poco ruidosa, lo cual dificultó mi descanso durante la noche.